Fui denunciado

Fui denunciado

Juan Gómez Martínez 

 

Sí, es cierto, me enteré por la emisora Radio Súper que fui denunciado penalmente por el doctor Álvaro Vásquez Osorio.




Espero salir de esto sin problema, como he salido de tantas que han interpuesto mis enemigos políticos. Cuando uno tiene la conciencia tranquila afronta estas dificultades con optimismo y con la frente en alto. Cuando uno no tiene nada qué esconder, esas cosas tan frecuentes, cuando se ocupan cargos públicos, casi llegan a hacer parte de la rutina.

Lo que me preocupa es tener que molestar a mis amigos y a la gente que haré llamar a declarar como testigos del tema de Álvaro Vásquez. Es que la memoria a esta edad avanzada ya tiene sus debilidades. Pediré los documentos que he conocido, pero que no tengo a la mano, documentos que me servirán como prueba para apoyar lo que he dicho públicamente.

Le ruego al doctor Henry Pava que me haga llegar el texto de la denuncia, que aún no conozco y que me leyó en una entrevista que gentilmente me hizo el viernes 12 de agosto. Le pido al periodista Germán Jiménez que me aporte copia de los documentos sobre el tema Álvaro Vásquez, publicados en EL COLOMBIANO.

Por otro lado, cuando rinda mi versión libre, pediré al funcionario que cite a declarar a mis amigos que han asistido a reuniones donde se habló del tema motivo de la denuncia, testigos de reuniones con el mismo doctor Vásquez y con otras personas que podrán aportar información importante. Pediré que se llame a declarar a quienes me pidieron acercamientos con el denunciante para evitar llegar a situaciones tan molestas como a las que hemos llegado.

Pediré que se llame a las personas que quisieron avanzar más y solicitaron que las investigaciones del periodista se adelantaran también contra funcionarios públicos distintos, pero nunca aportaron las pruebas que se les solicitaron. En fin, pido de antemano que me perdonen las molestias que la citación les puede producir, pero lo importante es que se haga total claridad de los hechos.

Acudiré a la justicia cuando se me llame. Acudiré tranquilo y aceptaré, si es que alguna vez me he equivocado en mis opiniones expresadas en diferentes medios y oportunidades. Lo más importante es que se haga claridad completa en este tema tan importante para Antioquia, para Colombia y para la política de nuestro país.

Otra cosa: pienso que ha llegado el momento de pedir que se modifiquen las leyes electorales y de los partidos.

Es preocupante la cantidad de dinero que se reparte, sin ningún control, en las campañas políticas. Es preocupante que se trate de comprar conciencias y votos. El daño que se le hace a la democracia, con esos dineros, se verá reflejado en el futuro del país. Las campañas deben ser financiadas por el Estado en su totalidad.

La gente se asusta con esta posibilidad, pero daré mi opinión sobre el riesgo que corremos. Las campañas políticas cada vez se vuelven más costosas. Cada vez se paga más dinero a los líderes para comprometerlos (cosa que no ocurría antes). Cada vez hay que contratar más medios de transporte costosos.

La publicidad es mucho más intensa, necesaria y cara, en fin, las campañas se volvieron tan costosas que es imposible financiarlas con dineros de la comunidad. Yo me pregunto: ¿Quiénes tienen el dinero suficiente para financiar las campañas políticas a los costos de hoy? Quienes tengan tanto dinero serán quienes nos van a gobernar en el futuro o quienes ocuparán las curules en Congreso y organismos regionales. El sistema actual acabará con Colombia si la financiación de las campañas y los partidos no es ciento por ciento del Estado.